viernes, 4 de marzo de 2011

Al fin

Al fin cariñete ha aceptado el biberón, y menos mal porque mi vuelta al trabajo es más que inminente, Al verlo en lugar de llorar comienza a patalear como un histérico ha comprendido que es comida ¡Al fin!
Tras probar varias tetinas, marcas de leche, temperaturas.... resulta que al niño le gusta la leche fria, lo cual es mucho más cómodo para nosotros, no hay que calentar el agua ni andar con termos para todos lados.

La verdad que aunque socialmente no esté bien decirlo para mí el destete ha sido una liberación siento que puedo ir a cualquier sitio o dejar al niño con alguién sin necesidad de usar ese instrumento ordeñador del demonio.

Tenía miedo de que la leche de fórmula le provocara estreñimiento, cosa que no ha sido el caso.

Lo único que echo de menos es que con el pecho contra toda estadística cariñete dormía mucho más, aguantaba unas 9 horas y media y ahora aguanta 4 ó 5, cosa curiosa sin duda, lo lógico hubiera sido al reves.